Frases con indirectas

  • Es fácil olvidar a quien nunca te tuvo en cuenta.

  • Amo mucho, pero olvido más fuerte aún.

  • Si hay algo que aprendí de ti, es que cometí errores que no voy a repetir.

  • No dediques tu tiempo a quien no te dedica sus pensamientos.

  • Tienes que tener bien claro que la persona que merece tu llanto, jamás te hará derramar una lágrima.

  • El día que te des cuenta del valor que tengo, ya será demasiado tarde porque yo estaré a miles de millas de tu corazón.

  • Quien dice «te amo» sin sentirlo, no tiene corazón.

  • Nunca huyas de una persona falsa por miedo, hazlo por asco.

  • Los manipuladores son los inútiles necesarios para que podamos echarle la culpa a otros de nuestras fallas.

  • Sé que me odian, pero lo más cómico es que no sé absolutamente nada de ellos.

  • Es muy triste ver a quien te entregó su amor entregárselo a otra persona como si nada hubiera pasado.

  • Te agradezco por todo el dolor que me has causado; gracias a ello, me has dado la oportunidad de conocer a alguien que verdaderamente valga la pena.

  • No creas que mi sonrisa es de felicidad, sino que es de la resignación a la que te lleva la costumbre de vivir algo pésimo todos los días.

  • Eres la clase de amigo que solo vienes cuando tienes tiempo, lo que siempre es a destiempo.

  • Mi silencio no es sinónimo de mi ignorancia, sino de los planes de mi venganza.

  • Entiendo que me consideres mala persona; te digo las verdades que tú te ocultas a ti mismo.

  • ¿Sabes por qué dejé de hablarte? Porque caí en la cuenta que no eras lo suficientemente bueno como para que yo dejara de lado mi amor propio.

  • No pude seguir a tu lado porque encontré a alguien que en vez de hacerme regalos costosos, me regala momentos hermosos.

  • Te dejo en libertad porque me di cuenta que no puedo aferrarme a lo que no me quieres dar.

  • Fingir que no me importaba tu frialdad fue muy duro, pero tuve mi recompensa cuando la ficción se hizo realidad.

  • No voy a seguir malgastando mi tiempo con alguien que no merece ni los minutos en los que se cuela en mis pensamientos.

  • Yo no te perdí a ti, tú me perdiste a mí.

  • Los silencios que he acumulado para no perturbarte hicieron de mi una persona perturbadora.

  • Mi felicidad siempre fue motivo de molestia para mi, ¿me amas o solo lo dices para sonar tierno y cautivador ante los ojos de los demás.

  • Me he distanciado de ti porque pensé que no te hacía falta, pero veo que es más grave que ello: ni siquiera de diste cuenta de mi ausencia, como tampoco lo hiciste de mi presencia.

  • Quiero estar al lado de alguien que note cuando llego y que sienta cuando me voy; alguien muy diferente a ti.

  • Seguí insistiendo porque te quería, pero no oí a la vida queriendo decirme que no eras para mí.

  • Sigues pidiéndome que te responda, pero ¿acaso no te das cuenta que mi silencio es la respuesta más poderosa?